Me robastes el corazon
Ladrón de mis ilusiones... ¡Me robaste el corazon
devolviste el color, su latir y sensaciones.
Es un feliz prisionero en su jaula enamorada
hoy, al saberse amado no echa de menos nada.
Valió la pena la espera, encontrarte como aguja
en un inmenso pajar hizo cambiara de brújula.
Con tu alegría lo enhebras en tus hoyitos risueños
y el empieza a ronronear como gatito a su dueño
.
¡Eres feliz corazón! Hasta hace poco llorabas,
ya ves que tuve razón al decir que las trastadas
encuentran su recompensa en otra alma desolada,
que quizá sufrió lo mismo, pero que al fin es curada.
Dejaremos puerta abierta para amar con libertad,
porque el amor no se exige, nos da la oportunidad
de retomar su camino sin tener necesidad
de amarrarse entre caprichos que lo lleguen a asfixiar.
Ladrón de mis ilusiones mi corazón ahora es tuyo,
te lo entrego a que lo cuides y no le hagas perder
el color que recobró en mi cuerpo de mujer,
que lo único que ansía es contigo envejecer.
